Los inhibidores de corrosión son una clase de »vacunas» que elevan las »defensas» contra los »virus» de la humedad, salinidad y carbonatación en el acero y el hormigón.

Agregados al hormigón fresco, postergan por décadas la activación de la corrosión y retrasan hasta por 30 años su propagación.

CODEMET trabaja con unos de los mejores inhibidores de corrosión en el marcado, como son:

Es un inhibidor de corrosión migratorio (MCI) basado en Carboxilato de Amina que extiende por décadas la vida de servicio de las estructuras, al postergar de dos a tres veces el período de activación de la corrosión en la armadura y luego reducir en un 80% la corrosión, postergando por 30 años el período de propagación de la corrosión, antes de efectuar la primera reparación del hormigón.

Al ser agregados al hormigón fresco o al mortero, se disocian en forma de iones  que son atraídos eléctricamente a las zonas anódicas y catódicas del acero de refuerzo, formando un film repelente a la humedad, que protege el metal.

Es un inhibidor de corrosión migratorio de nueva formulación que se aplica con brocha, rodillo o soplete sobre las superficies de hormigón endurecido, con la finalidad de extender la vida de servicio al postergar significativamente el período de activación de la corrosión en la armadura.

En el caso de estructuras antiguas o ya contaminadas, es decir en las que ya se ha iniciado el proceso corrosivo, el inhibidor actua reduciendo hasta en un 80% la tasa o velocidad de corrosión, ahorrando cotos al postergar por varios años su reparación.